Voy a sacar de mi ruina los cuadros que me recuerdan a ti. Voy a vivir con menos, para poder moverme con libertad por los pasillos del pensamiento. Voy a latir con menos fuerza, escogiendo solo los latidos que me hagan llegar hasta tu alma. Voy a deshacerme de toda mi ropa, por que desnudo quiero alcanzar el matiz de una caricia, la intensidad del beso, sin telas de por medio. Voy a escribir ese poema sin palabras para asomarme al balcón de mis miedos y saltar, saltar al vacío llenando mis pulmones de aire. Voy a acariciarte solo con la punta de los dedos, para erizar el tiempo y ponerlo de punta en tus pechos. Voy a amar sin regalos, sin miedo, sin el día internacional de algo. Quiero pasear descalzo sintiendo la raíz en mis pies, sangrando el origen y comiendo pipas al sol. Voy a quitarle toda la ropa a cada encuentro, para notar la piel erizada en la corteza rasgada de mis labios. Lo has adivinado. He aprendido a quererte, he aprendido a quererme justo cuando has dejado de estar.